Pueden niños adoptar letras de música con misoginia y discriminación
Ante la iniciativa de los diputados de Morena para prohibir la reproducción musical de reggaetón y narcocorridos en planteles educativos, Anagilda Mondaca Cota, investigadora de la narcocultura mencionó que no es la primera vez que se pretende prohibirlo.
La investigadora explicó que además de estos géneros musicales están las cumbias las cuales tampoco contribuyen en el desarrollo infantil. Además, dijo que el proceso para que acepten esta iniciativa es complicado ya que se destructura el derecho a la libertad de expresión, pero reconoce que de aprobarse sería un avance positivo para la comunidad infantil.
“Planteado en que se prohíba o se dejen de escuchar en las escuelas es bueno que se establezca el punto en esos ámbitos porque lo que se hace es una cosificación de las niñas y niños cuando se utilizan para los festivales este tipo de música. No contribuyen en mucho a la formación de valores, más bien se fomenta una cosificación del cuerpo y aparte una sexualización en las niñas que su estructura mental no está preparada”.
El contexto que acompaña el ritmo musical viene acompañado de discriminación, misoginia y en ocasiones los escuchas adoptan comportamientos de las letras.
José Manuel Valenzuela Arce, investigador de Estudios Culturales de la Frontera Norte, dijo que en la actualidad en México cada día se registran alrededor de nueve feminicidios y que además la incidencia de juvenicidios los cometen los mismos jóvenes, lo cual debe combatirse desde los centros educativos.
“Estamos pensando en el estigma, esas marcas sociales y culturales posibilitan lo que es colocar a otros como identidades acreditadas y des acreditables que participan en condiciones de interiorización social, el segundo tiene que ver con el estereotipo estas formas endurecidas que a pesar de tener información que demuestran que nuestras creencias y saberes son equivocados se mantiene esa perspectiva excluyente”.
Cada persona es libre de escuchar el género musical que desee, sin embargo, los investigadores concuerdan en que se puede regular la reproducción de música que induzca a la violencia en las instituciones académicas.