Historiadores piden que se regule y se proteja edificaciones del centro histórico de Culiacán
CULIACÁN. Aún hay tiempo para rescatar las edificaciones del centro histórico de Culiacán, de las más de 600 edificaciones hasta los años 40, pero de esa década en adelante, el paso de la modernización mal entendida, destruyó una gran cantidad de estructuras monumentales e históricos que eran patrimonio cultural de Culiacán, señaló el cronista Francisco Padilla Beltrán.
El historiador de la capital de Sinaloa, estimó que hay arriba de 300 edificios en pie, los cuales han tratado de preservarlos, pero muchos propietarios no muestran interés por mantenerlos, tal es el caso de la casona que se derrumbó en Rafael Buelna y Andrade, que prefieren dejarlos así para después cambiar el uso de suelo para otro aprovechamiento, perdiéndose paulatinamente esa parte de la historia.
“Ya tenemos mucho tiempo tratando de preservarlos, la Escuela de Arquitectura, La Crónica, el mismo INAH, pero como que no hay una política pública que verdaderamente pueda responder a este interés de preservar, siempre los intereses particulares se salen con la suya, y terminan derrumbándose a veces de manera mañosa nada más dejan las paredes, o dejan que se caigan, porque dicen bueno no podemos hacer nada porque está prohibido tumbarlos, dejamos que se caigan, y cuando se caigan ya podemos proceder”.
Incluso, se debe buscar proteger las edificaciones de inicios del presente siglo, las cuales no son consideradas con carácter histórico en el reglamento, pero sí tienen un valor cultural y artístico, al ser construcciones con diseños arquitectónicos de su época.
El cronista de Culiacán, dijo que se tiene que sensibilizar a los gobernantes para que redireccionen políticas para preservar nuestra historia y cultura para ser transmitida a las nuevas generaciones.
Julio Caro
