El 3 de mayo, día de la Santa Cruz es también por tradición considerado el Día de los albañiles. En muchas de las obras, los trabajadores de la construcción colocaron cruces con flores, para pedir que la protección divina los ayude con trabajo y salud.
Juan Álvaro Beltrán, tiene 15 años trabajando en albañilería, es maestro en enjarres, pegado de tabique y colado de pisos, dice que le gusta lo que hace y no lo cambiaría por otro trabajo, y a pesar de ser un trabajo muy pesado, comenta que es bien pagado y un albañil gana entre 2 mil y tres mil pesos semanales.
“Si bien pagada, si sale, no nos quejamos. Ha estado bien del año pasado hasta hoy. ¿Usted si tuviera oportunidad cambiaría de trabajo o seguiría en la albañilería? Pues me gusta la albañilería.
Como buenos mexicanos, no falta el buen humor entre los albañiles que se ponen apodos y además se divierten con uno de sus pasatiempos favoritos, que es decirles piropos a las mujeres, esto a pesar que a veces no salen muy bien librados, pero dicen que bien vale la pena apreciar la belleza femenina.
“Los apodos de los albañiles: el güero, el güero camarón, el gabacho, el ramoncito y el Chapito, ah y aquel es el Changoleón, a mí me dicen el Álvaro”.
¿Qué tan cierto es que echan muchos piropos? “Algo nada más a las muchachonas hermosas que hay aquí en Sinaloa, aquí no hay muchacha fea, todas son hermosas, yo creo que ya es como tradición de nosotros”.
¿Y no han tenido problemas? Muchas de las veces, sí, ha habido problemas que nos echan la patrulla… pues vale la pena, porque como le digo, todas las muchachas son hermosas”, comentó el sonriente Álvaro.
Arturo Rosas Guzmán, a quien sus compañeros de la obra, llaman el “changoleón”, dice que la Fiesta por el Día del Albañil será hasta el próximo sábado, porque no conviene una fiesta entresemana ya que tienen que trabajar y es muy difícil hacerlo si amanecen desvelados y sufriendo las consecuencias de la resaca, mejor conocida como cruda.
Katia Rivera
