El jueves pasado 16 de diciembre, los 40 diputados que integramos la Sexagésima Cuarta Legislatura aprobamos por unanimidad la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos del Estado de Sinaloa para el ejercicio fiscal del 2022. Un presupuesto histórico con sentido social, humano, responsable y austero.
Es un logro compartido, ante el cuál se privilegió el dialogo y el respeto, dentro de un ejercicio democrático y republicano con propuestas y planteamientos orientados a la búsqueda del Estado del Bienestar, reducir la brecha de desigualdad, distribuir mejor la riqueza, apoyar a los que menos tienen y respaldar a quienes generan el desarrollo económico de nuestro estado.
La verdadera transformación de Sinaloa está en marcha. Después de escuchar y considerar diversas voces ciudadanas, a organizaciones e instituciones, logramos reasignar más de 340 mdp en 37 rubros presupuestales para el próximo año. Los más de 58 mil mdp que ejercerá el poder ejecutivo se destinarán principalmente a desarrollo social, educación, salud, personas con discapacidad, mujeres y sectores vulnerables, con el objetivo de alcanzar un alto nivel de capital humano y físico, mejorar las condiciones de vida y trabajo de las familias, ampliar la clase media y proteger a los desprotegidos.
Además, se busca reconstruir el tejido social, ya que hay mucho por lo cual indignarse, se tiene como trasfondo valores y principios proclives, dando un gran valor al materialismo y al egoísmo, ni que decir de la obsesión por la creación de riqueza a cualquier costo, la gran brecha de desigualdad, la riqueza se concentra en muy pocas manos, unos cuantos tienen demasiados privilegios y arrastramos muchas injusticias sociales.
La reconstrucción del estado requiere de una convivencia inclinada en la confianza, en esa interdependencia que se basan las sociedades, en eliminar élites con privilegios y abatir la corrupción, en aumentar y homologar los salarios, en brindar seguridad a las familias, y otorgar un servicio de atención medica universal.
Sabiendo de la situación económica y social de los sinaloenses, pensando de manera asertiva, poniéndome en los zapatos de los demás y con la frente en alto, le puedo decir a la ciudadanía, misión cumplida. Sinaloa tendrá un presupuesto con sentido social, humano, responsable y austero.
