Con las mañanas un poco más frescas, en la calles del Centro de la ciudad, ya podemos oler y degustar el atole de pinole, champurrado, chocolate, la avena calientita, el pan con mantequilla y las gorditas fritas, que son típicas de la temporada y que son muy esperadas por la población, por su dulce sabor.
Desde las 5 de la mañana se empiezan a instalar y a preparar estos alimentos y aunque duran pocas horas con la venta, los clientes llegan puntuales para saborear los antojitos invernales.
“No ha empezado todavía el fresco pero en esta temporada siempre nos ponemos a mediados de octubre y sí han respondido bien mis clientes, desde cuando me estaban esperando mis clientes, ya me decían y aquí estamos, desde que llegamos gracias a dios ya casi terminamos”.
Por parte del municipio se otorgaron 25 permisos en el primer cuadro de la ciudad y ocho más en la periferia, conforme se va sintiendo más frío llegan nuevas solicitudes, estos puestos estarán instalados de este 15 de octubre a finales de febrero y están autorizados en un horario de 5 a 9 de la mañana.
Con información de Liliana Rodríguez.
