Paredes cuarteadas, pisos hundidos, techos a punto de caer y un sin fin de goteras son sólo una parte de los problemas que se viven en la escuela Eustaquio Buelna.
Luego de las lluvias registradas el pasado jueves, padres de familia de este plantel con más e 70 años, expusieron que pese a las condiciones en las que se encuentra la infraestructura hasta el momento las autoridades de la Secretaría de Educación Pública y Cultura (Sepyc) y del Instituto Sinaloense de Infraestructura Educativa (Isife) se han mantenido al margen. Sólo les han dado largas a la demanda de trabajos de rehabilitación que se requieren en esta escuela.
De acuerdo con la directora Dursin Salazar desde hace septiembre de 2017, cuando se registró un sismo en el estado, solicitaron a las autoridades su intervención para resolver las fisuras que se hicieron en los techos, sin embargo a más de un año el problema sigue. Incluso se ha agravado, pues los pisos se han empezado a hundir.
Con información de Cristina Medina
