A unas semanas de arrancar el ciclo agrícola otoño-invierno, es incierta la intensión de siembra de los distintos cultivos, los cuales se determinarán en función de los niveles de almacenamiento en las presas de la entidad, señaló Tomás Sánchez Montoya, presidente de la Asociación de Agricultores del Río Mocorito (AARM).
Dijo que actualmente no hay que echar las campanas al vuelo con las recientes precipitaciones pluviales, toda vez que aún falta para que los embalses alcancen niveles óptimos para cultivar sin restricciones en dicha región, que dependen en gran medida de las presas Varejonal y Eustaquio Buelna.
“Si llueve bien, no tendremos problemas porque el riego va a tirar más maíz, frijol que garbanzo, si no llega haber agua en las presas, se va ir más superficie a garbanzo, y no habrá suficiente semilla certificada”.
Recordó que en Sinaloa, se han llegado a sembrar arriba de 150 mil hectáreas de garbanzo, con dicha sobre producción se desploma el precio, donde lo recomendable es que se establezcan hasta 80 mil hectáreas de ese tipo de cultivo en el estado.
Mencionó que se puede realizar reconversión productiva a trigo en una franja fría, para evitar colapsos en la próxima cosecha.
“El trigo es una buena alternativa habiendo agua, de la zona de Angostura, lo que es La Escalera, la parte de Las Brisas, toda esa parte de ahí son muy buenas para trigo, toda esa parte y rumbo a la costa”.
