Los empresarios pierden utilidad por el incremento repentino de los precios de productos como ha venido ocurriendo con el limón, tomate y en ocasiones el camarón.
Lidia Mariel López Quiroz, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera en Culiacán, señaló que los restauranteros deben tomar previsiones porque los precios son cíclicos sobre todo de productos del campo, pero finalmente tienden a regresar a su nivel.
“A veces tenemos nosotros mismos que planear, en caso de un golpeteo en cuestiones de precios tenemos que estar prevenidos pero pues hay factores externos que no podemos controlar, pero sabemos que todo esto es cíclico, es momentáneo, pasa un periodo y otra vez vuelve el precio a disminuir”.
La dirigente de Canirac dijo que los restauranteros no pueden aumentar los precios por el encarecimiento de productos hortícolas u otros insumos, y por ello sacrifican ganancias mientras se estabiliza el mercado.
Katia Rivera
