El Papa Francisco proclamó este domingo a 35 nuevos santos, entre ellos tres niños indígenas mexicanos, conocidos como los “Mártires de Tlaxcala”, asesinados entre 1527 y 1529, además de un grupo de 30 brasileños, asesinados en 1645 quienes fueron considerados los primeros mártires de ese país.
En una ceremonia en la Plaza de San Pedro del Vaticano, Cristóbal, Antonio y Juan, los tres niños mártires fueron declarados santos, luego de un proceso eclesiástico que reconoció sus virtudes cristianas sin cumplir con los requisitos de un milagro y de las reliquias de sus restos.
Durante la misa de canonización y ante una gran delegación de fieles mexicanos, el papa Francisco elevó a los altares a los niños indígenas convertidos al cristianismo y que perdieron la vida entre 1527 y 1529.
Con información de Notisistema
