El Papa llegó este lunes a Myanmar, es un país de Asia, donde se encontrará una Iglesia que le ha recomendado prudencia a la hora de referirse a la persecución de la minoría musulmana rohinyá y que apoya fuertemente a la jefa del gobierno, Aung San Suu Kyi, pese a las críticas internacionales.
Y su primera reunión en la antigua capital birmana fue con el jefe de las Fuerzas Armadas, quien es considerado como el responsable de la ofensiva lanzada a finales de agosto en el estado de Rakáin que ha provocado la huida de más 620 mil rohinyás hacia Bangladesh.
Con información de Notisistema
