En las negociaciones del TLCAN con Estados Unidos, México tiene que allegarse de conocedores, escuchar a los expresidentes de México, a los excancilleres, a exsecretarios de Economía, de Hacienda, a los negociadores, académicos y conocedores. Con los exembajadores de México en Estados Unidos y con los embajadores de Estados Unidos en México. Son gente que sí sabe mucho porque vivieron estas circunstancias en diferentes etapas de la relación. De todos ellos se puede aprender, dijo el embajador en retiro Eduardo Roldán Acosta.
Con la experiencia de más de 30 años de trabajo en el Servicio Exterior, expresa:
“El presidente Peña tiene que en un tete-a tete, uno con uno, escuchar cómo negoció el presidente Luis Echeverría con Richard Nixon bajo las presiones de que Estados Unidos no quería que se establecieran relaciones con China. Y México finalmente en una llamada le dijo: “..Voy a pensar esa decisión, señor Presidente…”. Al colgar el teléfono, toma la decisión de que vamos a reconocer a China.
Escuchar o releer lo que dijo el presidente Adolfo López Mateos en sus memorias cuando toma la decisión de no romper las relaciones con Cuba.
Y así, platicar con los cancilleres que tomaron grandes decisiones: Bernardo Sepúlveda Amor o Rosario Green. Al expresidente Carlos Salinas, a Ernesto Zedillo, de cómo luchó contra Estados Unidos y se resolvió su diferendo. O al mismo presidente Felipe Calderón a quien en un tic por tac le puso un alto a Estados Unidos.
Hay que ser humildes y escuchar a los que ya pasaron por estas etapas, que no son las mismas, pero que también fueron difíciles. “Humildes en el sentido de aceptar que no sabemos todo. Hay gente sí sabe mucho”, enfatiza.
Es domingo y desde la tranquilidad de su despacho, se le pregunta: ¿Se tiene que hacer un frente común para negociar el
TLCAN?
-Se tiene que hacer un frente común. De todos ellos se puede aprender. Hay académicos brillantes que son conocedores a fondo de Estados Unidos.
Insisto: tenemos que ser firmes y mirarlos a los ojos y en ciertos momentos hasta levantarnos de la mesa para que reflexione la contraparte y nosotros también poder pensar qué estrategia seguir.
Subraya: Tenemos elementos: la migración. El año pasado casi 70 mil niños migraron solos de Centroamérica hacia Estados Unidos. Antes anualmente eran 400 mil migrantes, el 70 por ciento eran América Central.
Además, hay que hacer frentes comunes con América Latina. Asistir a los foros y buscar su apoyo en declaraciones. Eso es hacer política internacional también.
En cuanto a los apoyos a los mexicanos en el vecino país del norte, dijo además:
“Los connacionales más que regresar, quieren vivir allá. Entones, tenemos que defenderlos porque son mexicanos, mantienen la nacionalidad y además, envían más de 27 mil millones de dólares en remesas. Sí no los defendemos, vamos a ahorcar nuestra economía”.
¿Recursos de mil millones de dólares más los 50 mil millones serán suficientes para la defensa legal?
-El Sistema judicial en Estados Unidos es caro, pero vale la pena. Y sí se requiere más, habrá que hacer recortes a senadores y diputados, para allegarles más recursos.
Sobre las ciudades santuario que son otro apoyo para los connacionales, qué nos puede decir?
-La valentía de las ciudades santuarios, sobre todo la valentía de los alcaldes y gobernadores, donde está el grueso de nuestros connacionales, nos demuestran la solidaridad con los ciudadanos méxico-americanos y mexicanos que tienen hijos y se dan cuenta de la importancia del recurso humano, de la capacidad de trabajo y de la riqueza que generan para el beneficio de sus Estados.
¿Cómo se mueve el tablero geopolítico?
-No nos debe extrañar que estamos viviendo en un proceso de cambio en los países. Hay nuevas organizaciones internacionales, hay nuevos problemas, hay una sociedad civil activa, cuestionadora y hay redes sociales. Estamos viviendo un mundo de profundos cambios.
Lo que no entiende es que es contradictorio el señor Trump que dice: América first. Primero América. Y el New York Times saca un mapa, el globo en el que no existe más que Estados Unidos. Eso es engañarse. En ningún país se puede vivir en la autarquía. Y él lo que quiere es regresar a la autarquía. Ya no podemos vivir así. Hay una interdependencia que se ha generado a través de la historia y él está generando problemas en su propio país porque no entiende y con esto genera contradicciones.
Está el caso del general Flynn que era el consejero de seguridad nacional, quien tuvo que renunciar porque se comprobó que tuvo contactos con Rusia. “Y esto es ilegal. Un civil no puede tener contactos con un diplomático cuando ocupa un cargo. En este caso con el embajador de Rusia. No está permitido para tratar cuestiones que atenten o estén vinculadas con la seguridad nacional, como fue el caso.
Entonces, el problema está en que sí comprueban que Trump sabía que había negociaciones puede ir al impeachment. Lo pueden destituir. Por eso vemos que los demócratas se han quedado calladitos, salvo un senador que dijo que ya encontraron descontento entre las filas republicanas.
Entonces, está a discusión, pero como la mayoría del Congreso está en manos republicanas no quieren hacer aguas, dijo el embajador Roldán Acosta.
DUROS EN LA NEGOCIACIóN DEL TLCAN
Se retoma lo de la renegociación del TLCAN y dice: La única manera de actuar con ellos es con firmeza y México tiene que entender eso. Ser firmes, no nomás hablar del diálogo. Tenemos que poner las cartas.
En el pasado, en los 90’s se hablaba sobre todo cuando se inician los problemas del narcotráfico que habría que separar los problemas para no vincularlos con migración, con comercio, para no contaminarse, se decía.
Se acabó esa política. Ahora tenemos que poner todos los paquetes sobre la mesa y negociar un quid pro quo. Haber: Tú quieres el TLCAN, ya dijo que no desaparece, que hay que negociar. Para negociar sí va a ser mala esa negociación, no hay que negociar. Antes del TLCAN existía México y después del TLCAN también.
Tenemos que diversificarnos, estamos muy norteados. Todo vemos al norte. Tenemos que orientarnos, porque estamos desorientados. Tenemos que buscar nuevos mercados, pero reales, que no quede en palabras.
Recalca que es un tratado trilateral y México debe ser firme y no aceptar negociaciones bilaterales. A nosotros nos debe importar México y actuar en beneficio del interés y la seguridad nacional de México, no de Estados Unidos ni de Canadá. “Tenemos que ser firmes”.
“En diplomacia y como diplomático, negocié el tequila y la cerveza Corona, cuando era mexicana, en los años 90s, en Corea del Sur. Y a veces había que levantarse de la mesa porque los asiáticos son duros en la negociación”. Por tanto, tenemos que ser más duros porque tenemos los elementos para la negociación.
De modo que no debemos de tenerle miedo y mirarle a los ojos. Y precisa: “Sí negociamos con Kissinger por qué no podremos con Donald Trump. No hay que tenerle miedo; pero tenemos que escuchar en los procesos de toma de negociaciones. México debe escuchar a la gente que sabe, allegarse de conocedores, de académicos, insiste el embajador Roldán Acosta.
Con información de www.elsoldemexico.com.mx
