Aunque se reconoce la importancia y necesidad de tener un testamento para evitar futuros problemas entre los miembros de la familia, aún hay culiacanenses para los que este tema sigue siendo el último en la lista. Incluso, para algunos la repartición de sus bienes aún es innecesario.
Para Don Pedro, quien asegura que no tiene muchas pertenencias que repartir, comentó que la realización de un testamento se ha ido quedando de lado, pues a lo largo de su vida han sido otras las prioridades y necesidades que ha tenido que cubrir. Además, de que apenas le alcanza el tiempo para sentarse y pensar a quien le dejará su casa y un pequeño terreno que posee desde hace años.
“No lo he hecho, por pura desidia de uno, lo vas dejando y que esto, y que después; no me he propuesto de ir con el notario y decirle, no va a batallar mucho; no le he sacado la vuelta lo que pasa es que es pura decidía, va diciendo uno que el año que viene, que el mes que entra y así se le va yendo el tiempo”.
Así como el caso de Don Pedro existen otros sinaloenses que han preferido mantener fuera de su lista de pendientes la elaboración de un testamento, bajo el argumento de que primero hay otras cosas que resolver que hacer un cita con el notario, así como de para sentarse a hacer una revisión de sus propiedades y un análisis de quién o quiénes serán los beneficiarios.
“Por falta de tiempo, por desidia, porque uno no piensa en que va a llegar tarde que temprano ese momento, más que nada es por eso; como típico mexicano todo lo dejamos al último, además de que no lo hemos vista como una prioridad.
“Es un tema que pues para mi está lejos de pensar que me puedo morir, no es prioridad. Si estoy consciente de que algún día lo tengo que hacer”.
Si es lo que busca hacer su plan, tome en cuenta que septiembre es el mes del testamento y que podrá obtener descuentos en la elaboración de este documento.
Cristina Medina
