Cada vez es más común ver niños con sobrepeso, y una de las razones es la comida que ingieren en sus escuelas y la falta de desayuno en sus casas.
Actualmente, uno de cada tres niños tiene obesidad, señala la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición hecha en 2016.
Esto se evitaría si los hábitos alimenticios desde el hogar mejoraran, explica la nutrióloga Ana Isabel Ojeda Esquerra.
Si en la mañana no desayuna el niño, puede tener desde 12 horas sin alimento. Cuando llega el entremés en el receso escolar, la comida es almacenada en el cuerpo como reserva durante el día, y lo que el pequeño ingiera en la hora de la comida ya no se quemará, sino que solo se acumulará más y más.
Los desayunos deben ser equilibrados, combinar tanto proteínas como el huevo, como frutas y verduras y algún cereal como la avena.
También es elemental cuidar la alimentación de los menores en la escuela, por lo que se le recomienda que lleven alimento desde su hogar en una lonchera.
Una de las recomendaciones es llevar una fruta y algo de verdura picada, como jícama, pepino o zanahoria.
Si estos hábitos se establecen de buena forma desde pequeños, será poco probable que de adultos tengan problemas de sobrepeso relacionados con la mala alimentación.
Con información de Luis Gerardo Magaña
