Estamos en momentos en los que la reducción de costos y la búsqueda constante de mejorar las operaciones y los procesos son muy importantes, sobre todo el tener un mayor control de los gastos, así como el evitar realizar egresos que puedan ser evitados o sustituidos por otras opciones menos costosas, la frugalidad corporativa es una estrategia en las empresas, se fundamenta en que todos conozcan la importancia de cuidar el gasto, no con el enfoque de no gastar sino elegir la mejor opción y esto genera una cultura de cuidado, siendo moderados, evitando el derroche, una herramienta muy útil son los presupuestos y el seguimiento puntual en cada una de las áreas, implementando rendiciones de cuentas donde se presente la información relacionada con los egresos realizados y las características por las cuales se eligieron esas opciones y los beneficios relacionados.
En el emprendimiento es muy útil encontrar maneras de ahorrar dinero sin comprometer el resultado final, por ejemplo las oficinas, pueden iniciar en casa si el giro lo permite, trabajando home office, o rentando un espacio en formato coworking que es cuando una empresa renta espacios a varias empresas en un mismo lugar con oficinas independientes o mesas de trabajo compartidas, inclusive rentar una oficina con algún colega de giros complementarios puede ser también una opción, lo importante es no tener gastos fijos tan elevados que comprometan a la empresa recién creada.
Otro ejemplo que aplica para cualquier tamaño de empresa es el cuidado de las mermas, cuando las mermas no están bien controladas se generan gastos que pueden ser disminuidos, dentro de las estrategias de este año hay que considerar acciones para disminuirlas, evitar los desperdicios está relacionado con las acciones de ahorro en las empresas.
Hay cosas en las que no es conveniente ser frugal, como en la calidad de los productos o servicios, o en la contratación de personal clave dentro de la organización, cuesta más tener personas que no cumplen con los perfiles adecuados, erróneamente los empresarios creen que tienen un ahorro, pero en el corto plazo se nota la diferencia, este punto tan delicado es recomendable revisarlo de acuerdo a la escalabilidad que se tenga respecto a los objetivos estratégicos a cumplir, otro punto son los mantenimientos, hay empresas que creen que se ahorran al no mandar a sus unidades o equipos a mantenimiento preventivo, cuando llegan las descomposturas en ocasiones son mucho más costosas o pueden llegar a perder dicho recurso.
La frugalidad en las empresas está enfocada en la moderación del gasto, gastando en lo que genere calidad, cuidando lo que puede dar un beneficio en ahorro por una opción menos costosa que otra con igualdad de beneficios o con características que pueden ser aplazadas o no son relevantes en esos momentos. Ser moderado y cauteloso evita gastar demasiado en algo que no genere un beneficio mayor, es por eso que es relevante evaluar el costo – beneficio y tener varias opciones para elegir la más adecuada respecto a la situación actual de la empresa, y también cuando le está yendo muy bien a la empresa hay que analizar si es por cierta tendencia pasajera o se visualiza como algo más estable, hay momentos en los que debemos ser cautelosos y evaluar muy bien antes de gastar no con el objetivo de no hacerlo, sino hacerlo mejor.
