Fortalezas del liderazgo femenino
A medida que la participación de la mujer en las empresas se volvió más activa con el paso de los años, se ha ido abriendo camino poco a poco en posiciones directivas, con anterioridad se veía más a la mujer sin una jornada dentro de una empresa, como la que era costurera en casa, vendedora de ropa o de productos de catálogos, manualidades o repostería, entre otras actividades que les permitieran tener un ingreso y seguir atentas de prácticamente tiempo completo en el hogar, volviéndose un complemento al sustento familiar o siendo mujeres jefas de familia que empezaron a independizarse o salir adelante, estas nobles actividades no han desaparecido, al contrario, han tomado algunas más fuerza convirtiéndose en referentes como emprendimientos que han podido afianzarse en el mundo.
Ante los cambios que nos hacen evolucionar es que la mujer se ha ido preparando cada vez más, con mayores oportunidades y aunque existe un gran camino por recorrer la pauta ya está marcada: las mujeres dan valor a las actividades empresariales poniendo ese toque femenino en las empresas, y ¿Cuál es ese toque femenino? Es el uso de las fortalezas que dentro de nuestra actividad y liderazgo quedan de manifiesto, veamos algunas de estas en las mujeres: comprometidas, disciplinadas, empáticas, motivadoras, con orientación a las personas y al detalle, analíticas, participativas, entre muchas otras.
Al tener un enfoque más humanista el estilo de liderazgo predominante en las mujeres es el Transformacional, ejemplo de esto es la creciente participación de las mujeres en puestos diversos, incluyendo las áreas Gerenciales y Directivas de Recursos Humanos, Finanzas y Generales. Es importante resaltar que generalmente tenemos una combinación de estilos de liderazgo, sobre todo cuando se tiene más experiencia y se detecta el uso adecuado de los estilos de liderazgo de acuerdo a la situación y a la interacción que se tenga con una persona o grupos de personas enfocadas a un objetivo o en la resolución de conflictos, así como el uso de un estilo determinado al estar ante situaciones de estrés o presión que nos hacen reaccionar de diferente manera que en un estado normal, es esto lo que nos permite ir definiendo los estilos de liderazgo predominantes que manejamos, y las mujeres no son la excepción, por esto es que al considerar que la mujer tiene más tendencia al liderazgo transformacional; ¿En qué consiste? En un enfoque hacia el desarrollo personal para tener beneficios en las actividades laborales, esto se logra inspirando, motivando, delegando en los colaboradores para obtener innovación y desarrollo empresarial, recordemos que la delegación es un proceso de acompañamiento y responsabilidad compartida que genera mejores resultados al entrenar y dejar presentar opciones que permitan al colaborador opinar, proponer, experimentar y ser guiado.