La construcción de carreteras y puentes, de acuerdo a gobierno estatal y federal, estos son un punto clave para la movilización de productos, la conectividad en todo el país y el desarrollo de los diferentes sectores.
En lo que va de este mes en Sinaloa, el gobernador del estado Mario López Valdez, se ha dedicado a inaugurar diferentes obras carreteras, la más reciente fue la que de Badiraguato-Parral, pasado viernes 23 con una inversión total 261 millones de pesos. Si bien esta se ha convertido en una oportunidad de crecimiento para esa zona serrana, ¿se ha preguntado qué pasará, al menos este año, con las carreteras y puentes viejos? o ¿si esta administración tiene la capacidad para actuar en caso de que algún fenómeno meteorológico o una simple lluvia deje inservibles las rúas?
De acuerdo con el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas en Sinaloa, José Luis Sevilla Suárez, en el presupuesto actual del estado no se tiene contemplado ni un solo peso para atender emergencias carreteras, lo que significa que si un puente se cae o alguna autovía sufre desperfectos que ponga en riesgo a los usuarios, estos tendrían que esperar a que se resuelva la gestión de recursos.
En el estado se estima que existen 300 kilómetros de vialidades que requieren ser rehabilitados. Para eso se necesitarían 800 millones de pesos, mismo que no están disponibles en las arcas. El único recurso que se tiene disponible oscila entre los 3 millones de pesos, los cuales salieron de la venta de maquinaria. Este dinero se destinará para bacheo.
“Ahorita el presupuesto para carretera es limitado; yo no haría una sola carretera nueva, yo preferiría reparar lo que tenemos, arreglar lo que tenemos; todas las obras, inclusive las de acero, tienen caducidad al menos de que le esté dando un mantenimiento brutal como es el caso del puente que está en San Francisco, el Golden Gate, o la torre Eiffel, de París, que todo el santo día le están dando mantenimiento, entonces acá nuestros puentes pues tienen años, las alcantarillas tienen años, desafortunadamente no hay presupuesto estatal para todo eso”.
Para mantener en condiciones óptimas los 4 mil kilómetros de carretera estatal, los diputados tendrían que asignar al menos 500 millones de pesos para la conservación de las mismas y no para rehabilitación. Para esto último se ocuparía una partida mayor a los 800 millones de pesos.
Asimismo, los diputados locales tendrían que hacer un cambio de la Ley de Transporte y reducir los niveles de carga que tienen permitidos los camiones.
«Se necesita regular la carga de los camiones; por la ambición de cargar más con el mismo camión (se daña la infraestructura) muchos puentes y las mismas carreteras no están diseñadas para esa carga, no lo entiende la gente, la gente ve duro y dicen ‘le puedo echar lo que sea’ y no. Todas las obras aunque usted las vea de concreto o de lo que sea, de acero inclusive tiene su tiempo de caducidad”.
En el caso de las vialidades federales si se registrara una emergencia, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) podría echar mano del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) como lo hizo en 2013, cuando el huracán Manuel daño algunos tramos carreteros. También cuenta un aproximado de 500 millones de pesos para la conservación de las rúas, principalmente la México 15.
Héctor García Fox, delegado de la SCT en el Sinaloa, informó con dicho recurso iniciaron trabajos en 70 tramos de diferentes puntos del estado. A estos se les está dando mantenimiento para evitar complicaciones una vez que se vengan las lluvias.
“Nosotros lo que hacemos es no esperarnos a la época de lluvias, entre mejor tengas tu superficie de rodamiento trabajada hay menos posibilidades de que el día de mañana con el tema de lluvias tengas complicaciones, específicamente baches”.
García Fox indicó que contrario a la gobierno del estado, la dependencia federal tiene lo suficiente para atender cualquier problema que se reporte en la infraestructura carretera que les corresponde.
“Tenemos la capacidad para reaccionar de forma inmediata ante alguna situación que no implique por ejemplo que se nos colapse un puente, pero lo que son cruces o alguna socavación tenemos la capacidad para reaccionar de manera inmediata”.
A nivel estatal, los tramos carreteros que podrían convertirse en un arma mortal por la falta de rehabilitación son los que van de Mocorito a Guamúchil y de Los Mochis a Topolobampo. En el caso de la México 15 el punto vulnerable es el que va de Las Brisas, en Guasave, a Los Mochis.
Teniendo en cuenta esta la poca disponibilidad de recursos para la mejora vialidades, tome en cuenta que al momento de estar frente al volante debe ser precavido.
Cristina Medina
