¡De villano a héroe! ahora el huevo se reconoce como un superalimento

CULIACÁN.- En la década de los setentas se “satanizó” al huevo y se le acusaba de ser causa de enfermedades cardiovasculares por elevar el colesterol en el organismo, al grado que médicos recomendaban evitar su consumo o reducirlo, pero después de varias investigaciones científicas actualmente se reconoce al huevo como un superalimento, que tiene altos contenidos de proteínas de alto valor biológico, vitaminas como ácido fólico y complejo B, minerales y antioxidantes.

Al acercarse la fecha en que se celebra el Día Mundial del Huevo el próximo 11 de octubre, la Maestra Sandra Rizo Treviño, consejera del Instituto Nacional Avícola, brindó una conferencia sobre “Los mitos y realidades en torno al huevo y la salud” donde explicó que no hubo sustento científico en la “moda” de culpar al huevo de provocar enfermedades, y fundamentó que por sí solo este alimento no puede aumentar los niveles de colesterol en la sangre, pues influyen mayormente factores como la predisposición genética, la vida sedentaria, el tabaco, el estrés y el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas y grasas trans de productos procesados.

“Y entonces ahora ha entrado en esta corriente el huevo como alimento funcional, tiene fosfolípidos, tiene carotenoides que son antioxidantes, tiene colesterol que ya vimos que no va a impactar que el que impacta son las grasas saturadas, son las grasas trans… entonces cuando vemos todos estos efectos son como los famosos ‘Superfoods’ o sea tienen un efecto benéfico agregado, tienen efecto nutrimental agregado”.

La experta manifestó que el consumo de huevo es saludable y debe formar parte de una dieta equilibrada y completa, acompañada de actividad física y hábitos saludables.

“Un niño a partir del año lo puede consumir sí, adultos mayores sí, ya vimos que diabéticos con vigilancia y con su nutriólogo si, y toda la población sana deberíamos de estar consumiendo una dieta equilibrada, balanceada, completa, donde se incluya el huevo”.

Y de la nueva corriente que promueve el consumo de “huevos orgánicos”, la Maestra Sandra Rizo dijo que no hay diferencia nutricional entre un huevo de granja y uno producido por aves de libre pastoreo, además que señaló que es falso que haya alimentación con hormonas o sustancias químicas para las gallinas de granja, pues tan solo los costos serían insostenibles para los productores.