De super delegado a super relegado
El fracaso, la ausencia y la torpeza lo han dejado super relegado de la carrera por la gubernatura
En el cierre de 2018, el nombramiento más esperado del Gobierno federal en Sinaloa era la definición del super delegado, considerado por muchos el candidato “natural” para la gubernatura. Sin embargo, a dos años de distancia, Morena ha causado ya una terrible decepción en sus Gobiernos locales en Sinaloa: pleitos, engaños, ineptitudes, corrupción y las mismas caras de siempre son el común denominador en municipios clave hoy gobernados por la 4T como Ahome, Culiacán y Mazatlán.
Los diputados locales no aprovecharon que tenían mayoría calificada y se atascaron en peleas y acusaciones internas de corrupción; parece que ya es la marca de la casa de Morena porque incluso a nivel nacional el actual dirigente, Alfonso Ramírez, ha acusado a su predecesora, Yeidkol Polevnsky, ante la Fiscalía General de la República de “millonarios robos y desvíos de recursos públicos asignados a Morena, así como de vender presidencias estatales y candidaturas del partido”. Por cierto, ¿en este proceso llegaremos a conocer la verdad sobre la versión que hace unos meses trascendió en Sinaloa de que Gerardo Vargas ya se sentía presidente estatal de Morena a cambio de pagarle a Yeidckol 10 millones de pesos?
Por otro lado, recordemos que la principal responsabilidad de un diputado federal es la aprobación del presupuesto, en ese sentido ¿de qué le sirvió a Sinaloa que Morena se llevara el “carro completo” de 7 de 7 distritos federales y que además la 4T tenga la mayoría absoluta en el Congreso Federal?, si lejos de aumentar el presupuesto para Sinaloa, este disminuyó en más de 1,500 millones a pesos reales para este año. Pareciera que el acompañamiento mutuo que sí han tenido los senadores Rubén Rocha e Imelda Castro no ha permeado en absoluto con sus compañeros legisladores federales y menos aún entre los locales.
Esto se refleja contundentemente en la caída de Morena en las encuestas, sin embargo, no necesariamente lo ha capitalizado el PRI y mucho menos el PAN. Hoy, la caída de Morena en las encuestas se ha reflejado en un aumento de los indecisos, quienes al final, o pueden votar en contra de Morena o pudieran no votar, y con ello beneficiar indirectamente al PRI por ser un partido con una maquinaria electoral de base; estructura que Morena no supo construir. El fracaso, la ausencia y la torpeza del super delegado justamente lo ha dejado super relegado de la carrera por la gubernatura.
Jaime Montes, el ahora super relegado, ha sido el gran aliado indirecto del PRI, ya que falló como diputado federal al igual que sus compañeros de la 4T y falló aún más como super delegado, ya que ni le cumplió a los sinaloenses buscando más presupuesto para apoyar al campo, la pesca, los trabajos que necesitamos en Sinaloa, ni le cumplió a su partido porque hoy la estructura partidista de Morena en Sinaloa es inexistente. Nunca llegaron realmente los apoyos de los programas sociales a toda la población más necesitada como lo prometieron en campaña.
¿Entonces, estos fracasos ya ponen fuera de combate la candidatura de Morena para la gubernatura de Sinaloa en 2021? Claro que no. Puede ganar el PRI, puede ganar Morena o incluso podría ganar un ciudadano que no milite ni en el PRI ni en Morena; y habrá que considerar algunas interrogantes que son las que finalmente van a definir quién será el próximo gobernador de Sinaloa. ¿Cómo serán las alianzas, qué partidos van “solos”, qué tipo de candidatos, viejos y “nuevos” partidos, candidaturas independientes, desempleo, coronavirus y nuevos escándalos de corrupción y cárcel de priistas y panistas? Son algunos de los elementos a analizar para definir al ganador y a los perdedores por la gubernatura de Sinaloa en 2021. Sobre esto vamos a platicar en En Marcha la próxima semana. Por lo pronto no olvides lavarte las manos constantemente, y si estás con otras personas fuera de casa, ponte vivo y ponte el cubrebocas.