Crónica del juicio universitario: «levanten todo, se volvió a diferir la audiencia»
De nueva cuenta la audiencia del juicio contra el rector Jesús Madueña Molina y demás funcionarios del comité de adquisiciones volvió a diferirse, ahora para el 13 de septiembre
CULIACÁN. De manera progresiva, las audiencias del rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Jesús Madueña Molina, se han convertido en algo parecido a un día de campo, con una convocatoria que podría interesar a más de uno de cara a las próximas elecciones y eventos de campaña.
Y es que ya se volvió común la presencia de gran número de integrantes de la comunidad universitaria que en cada audiencia refrenda su apoyo al líder de la máxima casa de estudios.
La mañana de este jueves, cuando el rector Madueña junto con los integrantes del Comité de Adquisiciones de la UAS, de nueva cuenta se enfrentan al juez Adán Alberto Salazar Gastélum, no fue la excepción.
Fue poco antes de las 9 de la mañana cuando Madueña, arropado por sus abogados y acompañado por su esposa Sofía Ángulo, ingreso a la sala de audiencia, vestido con un pantalón negro y una camisa azul.
Previo a su ingreso, hizo una parada en la estación móvil de Radio UAS instalada al oriente de la explanada de la Sede de Justicia, donde aprovechó los micrófonos para arengar su reiterado discurso donde señala al gobierno en curso y los poderes circundantes de una presunta persecución política.
Entre gritos de «no estás sólo», Madueña y demás funcionarios de la universidad ingresaron al recinto. Se despojaron de celulares y demás artículos personales y pasaron otra vez al estrado, siguiendo la ruta ya familiar hacia la sala.
Tras de sí quedó la puerta principal de la Sede, blindada con una decena de elementos de la Policía Estatal Preventiva, adoctrinados para evitar que alguien intente ingresar sin debida autorización. En esta ocasión el recinto generó una gran afluencia, al punto que algunos medios de comunicación así como familiares y universitarios no alcanzaron lugar en la sala.
Afuera, los universitarios se apostaron en sus carpas. Después de las 9 de la mañana, de manera previsoria, algunos de ellos comenzaron a preparar sus almuerzos. Otros se acercaron a una carpa ubicada al costado de la puerta principal de la Sede donde un alma generosa comenzó a regalar tortas de cochinita.
A diferencia de la primera audiencia, la comunidad venía preparada con bebidas refrescantes y alimentos, incluso los de mentalidad emprendedora instalaron su puesto de vendimia de sandwiches, bebidas, galletas, pan y hasta heladitos.
Por eso la analogía de que, afuera, el ambiente refleja el festín de un día de picnic, en tanto que adentro, el rector y su equipo se defienden de los señalamientos de presuntos actos de corrupción.
KEVIN CHICUATE
