En las comidas de muchas familias mexicanas no puede faltar un refresco de cola justo en el centro de la mesa.
Las bebidas endulzadas son el producto que más consumen los adolescentes y el segundo que más ingieren los niños y los adultos.
Dulces, botanas y postres también forman parte de la dieta diaria, más que carne, huevo, frutas y verduras.
Por consecuencia la obesidad en niños creció en los años 2012 a 2016, de 26 a 29 por ciento, de 12 a 19 años incrementó del 27 al 35 por ciento y adultos mayores a 20, aumentó de 66 a 72 por ciento.
Con información de El Sol de México
