Consternados con la muerte de su compañera Rosa María, en la Facultad de Arquitectura les resulta imposible creer que cualquiera está propenso a un accidente.
La pérdida de su compañera, los ha puesto a pensar cómo en un segundo, aquéllo por lo que luchan puede esfumarse en un abrir y cerrar de ojos.
Además de su sentir, la situación los ha hecho analizar que al igual que la joven de 19 años, se han quedado hasta tarde en la universidad y corren riesgos dentro y fuera de C.U.
“Debe haber el alumbrado para que se pueda ver lo suficiente, también debe estar alguien al pendiente porque van a una alta de velocidad, más señalización porque cuando salía en la noche e iba a agarrar camión no se miraba nada, nomas las luces de los carros cuando vienen de lejos pero ya que están cerca no se puede distinguir nada”.
Rosa María fue atropellada la noche de este miércoles por un motociclista, quien también perdió la vida. Ambos jóvenes apenas tenían 19 años de edad.
Además del peligro que se vive afuera de la universidad, los estudiantes de Arquitectura denunciaron que ni adentro de la facultad están seguros, ya que no hay alumbrado y están igual de propensos de ser asaltados o embestidos por los automóviles que circulan sobrepasando los límites de velocidad dentro de la institución.
