Bomberos están propensos a golpes de calor al momento de combatir incendios
Su equipo de protección pesa alrededor de 30 kg, más el peso por la humedad y demás herramientas, nos narra “Bull” Guevara con 15 Años de entrega como bombero
CULIACÁN. – Carlos Guillermo “Bull” Guevara Casillas, un valiente bombero con una trayectoria de dedicación de 15 años al servicio de la comunidad, es una figura destacada en las filas de los Bomberos Veteranos de Culiacán. Esta institución, se constituyó en el año 2001, celebra 22 años de compromiso y sacrificio en beneficio de la población.
Carlos Guevara, hijo del Jefe de Estación de los Bomberos Veteranos de Culiacán y hermano de un Sargento Primero en el mismo cuerpo, proviene de una familia arraigada en esta noble vocación de servir a la comunidad. Incluso, tres de sus sobrinos, también se han unido a las filas de los bomberos voluntarios.
El compromiso de Carlos y su familia es con la seguridad y el bienestar de la comunidad. Incluso su esposa, también ex bombera, considera regresar al servicio, ahora que su hijo de cuatro años que ya ha crecido ha mostrado su interés de reincorporarse junto al resto del componente familiar.
Cuando se le pregunta sobre su motivación para continuar en esta profesión, Carlos Guevara lo resume con humildad y pasión: “Lo que más nos motiva es ayudar a la gente, el saber que podemos mitigar un poco ya sea sufrimiento, o dolores, o cuando atendemos pre hospitalariamente a las personas eso es lo que nos motiva, la satisfacción y el saber que podemos ayudar a la gente”.
Sin embargo, no todo es sencillo en su trabajo. Carlos lamenta los desafíos que enfrentan al responder a llamados de emergencia. La falta de cultura vial obstaculiza sus desplazamientos aun con el ulular y luces encendidas de la unidad de emergencia, algunos conductores, incluso, se involucran en comportamientos irresponsables, como intentar jugar carreras con las unidades de ataque rápido de incendios, lo que compromete la integridad física de las personas.
“Los automovilistas que no ceden el paso es lo que más se nos dificulta y hasta cierto punto es estresante para nosotros, ya que hay llamados donde informan que hay gente en el interior del domicilio que se está incendiando o la gente misma que hay prensados el que se nos atraviesen, que no nos cedan el paso juega mucho en el estrés del bombero porque lo único que se quiere es llegar a dar el apoyo, sin embargo, uno como maquinista y los compañeros bomberos tienen que llevar mente fría para poder llevar esta situación y sortear estas dificultades”.
Además, Carlos Guevara subraya la importancia de cuidar el equipo que utilizan, como los carros bomba de ataque de incendios, los equipos de protección personal y de respiración autónoma, debido a su alto costo y la relevancia crucial que tienen en su labor.
A lo largo de sus quince años de servicio, Carlos ha vivido numerosas experiencias, pero las que más lo han marcado son aquellas en las que se ven involucrados menores de edad indefensos y adultos mayores vulnerables. Estas situaciones le recuerdan la importancia de su labor y la necesidad de estar siempre dispuesto a ayudar.
“Desgraciadamente no la libró el señor, falleció en el hospital y son cosas que sí marcan porque te das cuenta era familiar de una compañera, yo conviví con esta compañera, entonces si te marcan, en este mismo incendio rescataron dos perritos, uno de mis compañeros le dio tuvo que dar oxigenoterapia en el lugar para poder ayudar al perrito”.
De igual forma, en esta época de verano es cuando más se les dificulta físicamente prestar el servicio en casos de incendios, incluso el riesgo de sufrir golpes de calor, toda vez que el equipo de protección personal que llevan puesto conformado por botas, guantes, pantalones, chaquetones y tanque de oxígeno que ronda el peso los 30 kilogramos, más la humedad por el agua y demás accesorios como cargar escaleras y otras herramientas de trabajo.
Carlos Guillermo Guevara Casillas y su familia son ejemplos de dedicación y servicio desinteresado a la comunidad. Su compromiso desde los Bomberos Veteranos de Culiacán continúa siendo un faro de esperanza en momentos de emergencia, demostrando que la vocación de servir y proteger sigue viva en nuestra sociedad.
JULIO CÉSAR CARO
