Por su naturaleza, las clínicas, consultorios y hospitales desechan material infecto contagioso, por lo que deben de tener un correcto manejo para eliminar riesgos de enfermedades y posibles muertes en la población, sin embargo, en algunos municipios del estado se han presentado casos donde, sin ningún problema, tiran estos desechos en la vía pública, como ocurrió en el Centro Médico de Especialidades de Los Mochis.
De acuerdo a la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRISS), estos establecimientos tanto públicos como privados están obligados por la ley de salud a dar un destino final a estos desechos, a contratar una empresa para la recolección de estos materiales peligrosos.
El subgerente de Obras y Servicios Públicos del Ayuntamiento de Culiacán, Aarón Ceceña, informó que para evitar accidentes y riesgos con los trabajadores de aseo y limpia y los pepenadores, no recogen el material de este tipo que dejan tirado en la calle.
“Esa lleva una disposición final muy diferente a la basura normal, aquí hay una empresa que se dedica a la incineración de ese tipo de material, porque se considera material peligroso, un material que contamina, un material que puede dañar a los mismos trabajadores, entonces nosotros evitamos levantarla, eso para que no vaya a caer al relleno sanitario”.
Dijo que en lo que va de la administración municipal actual no se ha presentado reporte de un lugar clandestino con ese tipo de basura.
“Sí se ha encontrado de vez en cuando, que sea una jeringa cosas de esas, los hospitales nos tienen que separar la basura la basura normal y la basura que lleva un tratamiento especial, en este caso nos acercamos a la misma dependencia a pedir que no estén echando ese tipo de basura, porque no la vamos a levantar”.
No solo los hospitales y clínicas desechan materiales infectocontagiosos, también en casa se tiran sin ninguna precaución jeringas y objetos punzo cortantes que arriesgan a los trabajadores de la recolección y pepenadores.
La recomendación para las amas de casa es forrar con papel y cinta los objetos punzocortantes y jeringas para que no puedan causar daños.
Con información de Liliana Rodríguez.
