El cardenal Alberto Suárez Inda informó del secuestro, el pasado lunes, de José Alfredo López Guillén, párroco de la comunidad de Janamuato, en el municipio de Puruándiro, Michoacán.
En un video difundido por Youtube, el también arzobispo de Morelia lamentó que después de la gran pena que trajo a la Iglesia Católica el asesinato de dos sacerdotes en Papantla, Veracruz, ahora con gran angustia desconocen el paradero de este religioso.
Indicó que López Guillén fue sacado de la casa parroquial, donde habitaba, luego del robo de diversos objetos en su vivienda y de su automóvil.
“Pedimos a Dios que respeten su integridad, que respeten su vida, que pueda volver pronto al ejercicio de su ministerio. Nos unimos en oración por sus familiares, por sus feligreses que viven este momento de angustia”, expuso.
Suárez Inda aseveró que el sacerdote secuestrado es un hombre bueno y pacífico, dedicado a hacer el bien, “por lo cual no se justifica de ninguna manera esta barbaridad”.
El cardenal arzobispo pidió también unirse en oración por la paz y el respeto a la vida y, sobre todo, por la conversión de quienes se dedican a “hacer el mal”.
