Hilos, madera, tela y magia: las marionetas
Un pequeño muñeco de madera y tela se puede convertir en un ser con vida que llena de alegría en un escenario cualquiera. Se trata de la magia de los títeres, y dentro de estos espectáculos están los que protagonizan las marionetas de hilos.
Es una técnica en la que el titiritero tiene algunas crucetas en las manos con hilos que unos centímetros debajo sujetan alguna extremidad de la marioneta. De esta manera, al levantar un sector de la cruceta, el muñeco mueve alguna parte de su cuerpo y da la apariencia de que tiene vida propia.
Pero no se trata de una tarea nada fácil, ya que se necesitan días para hacer el muñeco y años para perfeccionar la técnica de las crucetas. Se recomienda que el artista practique siempre enfrente de un espejo.
Esta disciplina se remonta a la época de loa antigua Grecia, incluso Aristóteles hizo algunos estudios sobre ellos
El alemán Gregor Schwank sabe muy bien de qué se trata este espectáculo, ya que ha dedicado más de 30 años de su vida a este trabajo.
Un titiritero profesional hace sus propios títeres de acuerdo la movilidad que quieran que tengan. Mientras alejaba a los niños de sus preciadas obras de arte, Gregor explica que dura entre 50 y 100 horas en hacer la marioneta.
El tipo de muñeco que se quiere define el tipo de cruceta a usar, ya sea si será con características humanas o animales.
El esfuerzo es tanto que se termina creando un vínculo entre el dueño y la marioneta, tal es el caso de Miquito, un títere que tiene más de 20 años con Gregor.
Miquito tiene la particularidad de que está hecho con 27 cuerdas, cuatro de ellas se usan para abrir y cerrar los ojos.
Gregor Schanw es un ejemplo de la dedicación que se requiere para ser un artista de marionetas de hilos, una práctica que es mucho más difícil de lo que parece.
Con información de Luis Gerardo Magaña