Un soldado iraní abrió hoy fuego contra sus compañeros de una base en la periferia de esta capital, matando a cuatro de ellos e hiriendo a otros ocho, sin que se conozcan por ahora sus motivos.
El ataque, el segundo en su tipo en las últimas semanas, se registró en la base aérea militar de Kahrizak, ubicada en la periferia de Teherán, a unos 10 kilómetros de distancia.
El pistolero, quien sobrevivió a las lesiones, había sufrido de “psicosis temporal”, según un reporte de la agencia informativa ISNA.
En Irán, el servicio militar es obligatorio para los hombres mayores de 19 años de edad, quienes deben pasar hasta dos años en campos de entrenamiento.
Con información de El Sol de México
