Felipe de Edimburgo abandonó el jueves el hospital en el que ingresó un día antes para tratar una infección.
Felipe, de 96 años y esposo de la reina Isabel II, ingresó al Hospital Rey Eduardo VII el martes para permanecer bajo observación debido a una infección relacionada con otro problema de salud que no fue revelado.
En los últimos años ha sido hospitalizado debido a una arteria coronaria bloqueada, una infección vesicular y otros trastornos, aunque su estado general de salud ha sido bueno.
