Ante el terrible hecho ocurrido en una escuela privada en Nuevo León donde un menor disparó a compañeros y a su maestra para al final terminar con su vida, el director del Hospital Psiquiátrico de Sinaloa, José María Conde Gámez recomendó a las autoridades educativas a activar un programa donde los niños “problema” reciban como obligación atención especial psicológica para tratar sus estados depresivos o violentos y que ésta atención sea de carácter obligatorio para que el estudiante pueda continuar con sus estudios, pues al decir del especialista esta sería una medida preventiva para mejorar la calidad de vida de los niños y adolescentes y a su vez la de quienes lo rodean.
“Si debería de haber un programa de parte de gobierno en este caso de Educación Pública y Cultura que los niños que son reportados con problemas se les exija recibir atención especial para que sigan estudiando, pero si resulta que el papá o la mamá son violentos hay una ambiente de drogas, armas, en general algo inhóspito para un adolescente es difícil intervenir para hacer conciencia”, señaló.
Por otra parte el funcionario estatal, lamentó que un factor importante que no ayuda a que estos menores reciban un tratamiento adecuado, son sus propios padres de familia quienes en ocasiones dijo responden de manera agresiva contra los docentes si estos les dicen que sus hijos son golpeadores o molestan a sus compañeros, por lo que hizo un llamado a la conciencia de los padres al decir que los menores aprenden del ejemplo de sus padres, “si nos comportamos como delincuentes nuestros hijos se van a portar como tal”, refirió.
Susana Bastidas
