Tapas que dibujan sonrisas
Rojas, verdes, azules, blancas, chicas, medianas o grandes, eso no importa. Las taparroscas sólo tienen dos caminos. El primero, es ser parte de las de toneladas de basura que producimos. El segundo, son los centros de acopio de Tapas por Sonrisas, donde lejos de favorecer a la contaminación se vuelven en de esperanza para decenas de niños con cáncer.
Cada año en todo México se generan 800 mil toneladas de desperdicios de botellas de plástico, incluidas las taparroscas. Ante estos números y la posibilidad de promover el reciclaje y darle un valor a las tapas, la asociación Ayudemos a Ayudar puso en marcha la campaña Tapas por Sonrisas, logró mover a pequeños y grandes de Culiacán, Los Mochis, El Fuerte, Mazatlán, Elota y Guasave.
Yolanda López Vega, presidenta de Ayudemos Ayudar, explica que el trabajo es bastante sencillo. Basta con tener ganas de apoyar para recolectar la mayor cantidad de taparroscas para después llevarlas a un centro de acopio donde posteriormente serán trasladas a una recicladora ubicada cerca de Campo el 10. Ahí, las tapas se convierten en dinero, mismo que servirá para pagar una quimioterapia, medicamentos, traslados o una prótesis para los niños que son apoyados por Ganac, ya que es esta la organización a la que se entregará el dinero que se junte de la colecta.
“Lo que nos llama la atención es que estamos cumpliendo los dos objetivos; el primero que es el reciclado y el cuidado del medio ambiente con el tema del reciclaje y el segundo que podemos transformar esta basura que pudiéramos llamar en una esperanza para un niño y una familia que está luchando contra esta enfermedad (cáncer). Con esas tapas estamos dando esperanza”.
Yolanda comenta que para cumplir esta labor no hace falta desembolsar ni un solo peso, pues únicamente se tiene que estar al pendiente de que ninguna tapa plástica termine en el cesto de basura.
Para Valeria y Valentina, dos pequeñas de apenas 5 años de edad, la labor es clara y sencilla. Ellas han entendido que al sumarse a Tapas por Sonrisas es un paso que puede marcar la diferencia para los niños de Ganac.
“Recolectamos fichas de todo tipo. Mi mami me ayudaba cuando íbamos con mi abuelita, en la calle juntábamos todas las tapas para que los niños se sientan mucho mejor y puedan estar libres. Guarden las fichas para ayudar a los niños que están enfermitos y dárselas para que las conviertan en monedas”.
Con el dinero que se junte con la colecta de las taparroscas Ganac estará en condiciones de ayudar en el momento que sea necesario tanto a los 146 niños que están en tratamiento y los 588 que están en vigilancia, ya sea con el pago de una quimioterapia, las cuales van desde los 8 a 10 mil pesos, con medicamentos especiales y prótesis, menciona Patricia Trejo, miembro de Ganac.
“La verdad hay que apoyarlos, los apoyan a ellos, nos apoyan a nosotros; la verdad es una de las tareas fácil, porque en la casa de todo mundo hay tapas por el agua, productos de limpieza, es algo que tenemos todos a la mano que no hay que desembolsar dinero. Las tapas se convierten en dinero”.
Para participar en Tapas por Sonrisas solo debe juntar sus taparroscas ya sea de refresco, agua o detergentes, todas cuentas. Debe llevarlas a los centros de acopio ubicados por el bulevar Constitución, cerca del Hospital Pediátrico, en las tiendas Natuvit, escuelas y las instalaciones de Ganac o el estadio de Los Tomateros.
Recuerde con una tapa puede dibujar una sonrisa en un pequeño y su familia.
Cristina Medina