La muerte de Liliana Carolina Ricalde Romero en la Universidad del Valle de México Campus Tlalpan, no se trató de un caso de acoso escolar (o bullying), aseguró Sophie Anaya, vocera de esa institución.
El pasado 26 de octubre alrededor del mediodía, Liliana Carolina, de 18 años, murió después de que caer de unas escaleras en las instalaciones escolares y no se había podido explicar qué fue lo que pasó; en un primer momento se dijo que era un accidente pero la Procuraduría capitalina dijo que investiga el suceso como un posible homicidio.
«Hay muchas versiones del hecho. Lamentablemente lo único que sabemos es a través de las personas que estaban cerca de Liliana cuando cayó, entonces, son versiones distintas», dijo la vocera de la institución.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva, en Radio Fórmula, descartó un posible caso de acoso escolar. «Por lo menos la familia nunca nos lo notificó previamente que estuviera sufriendo este tipo de situaciones», dijo.
Sophie Anaya destacó que semanas antes a la caída de Liliana Carolina Ricalde «hubo un protocolo que hizo la universidad que mandó llamar a un grupo de alumnos que estaban, aparentemente, en posiciones antagónicas».
No obstante, Liliana no estaba en ese pleito. “No había nada que nos permitiera anticipar una situación de esa naturaleza», comentó.
La administrativo comentó que dicha reunión no estaba relacionada con alguna amenaza que hubiera recibido Ricalde Romero. «Si la recibió, eso sucedió en el ámbito privado y no fue reportado a la universidad», sostuvo.
Sobre la altura del barandal de la escalera donde cayó Liliana, el cual llega a la altura de las rodillas, Sophie Anaya señaló que se trata de un inmueble que tiene 30 años, que periódicamente recibe visitas de Protección Civil.
«Y no hemos recibido ninguna observación en cuanto a que alguna de las áreas fuera insegura (…) Somos sensibles a la situación y, obviamente, vamos a incrementar la medida del barandal», aseguró.
En cuanto a la atención que recibió Liliana Carolina, Anaya informó que la primera persona, alguien de seguridad, llegó 20 segundos después de la caída, lo que lo confirma el video de una cámara de seguridad de un cajero automático dentro del campus.
Precisó que la doctora del campus llegó antes de dos minutos y la ambulancia arribó a la escuela 20 minutos después del accidente.
Detalló que la UVM llamó a la ambulancia del seguro, pero al ver que no llegaba, se buscó una unidad del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), así que al llegar la ambulancia del seguro, la despacharon, «pero una vez que ella ya había salido al hospital».
Comentó que la ambulancia tardó alrededor de 50 minutos en llegar al hospital.
Sospechas de la familia
En el mismo espacio noticioso, Lilia Romero, madre de la joven, indicó que hasta el momento, «no tenemos ningún indicio de lo que sucedió, la escuela sigue diciendo que no sabe lo que pasó, las autoridades están investigando, pero seguimos sin saber qué realmente pasó”.
Cuestionada sobre si su hija tenía algún problema, dijo que «estaba en cuarto semestre, era su primer semestre en esta escuela. Ella venía de otra (…) tenía muy poquito. Sí había algo de bullying, había dos grupos ahí en la escuela, que al principio del semestre, cuando empezaron en primero, ellos eran un solo grupo, después se dividen y mi hija llega en cuarto, conoce a unos.
“Luego se empieza a juntar con otros y le llega una llamada a su celular, entonces la empiezan a amenazar: ‘Ya sé que tu grupo de amigos mandó golpear a uno de los de mi grupo, cuídate ya sé dónde vives y a qué hora sales’.
«Entonces (Liliana) dijo quién habla, tal amiga, sí soy fulanita, oye es una broma le contesta mi hija y esta niña le dijo no, no es una broma, entonces colgó y le habló a otra de sus amigas, le dijo oye está pasando esto, sabes algo, no.
“Ella le contesta yo estoy en mi casa no sé absolutamente nada de lo que me estás diciendo y empezó a hablarle al niño golpeado, a los otros que habían sido los supuestos golpeadores», comentó.
Sobre el bullyng, el abogado de la familia, Mario Rivas, subrayó que «el Ministerio Público se encuentra haciendo las diligencias necesarias y si se ha tocado en ciertas entrevistas, que había un problema de bullying, pero la escuela no ha aceptado, ellos expresamente que existía ese problema.
“Al contrario han tratado de disminuir el problema que existía, el tema en las declaraciones se ha presentado y se ha mencionado ese problema», sostuvo.
Reconoció que actualmente la Universidad ha tenido gran disposición en ayudar, sin embargo, al principio fueron un poco renuentes, «hasta que empezó a haber un poquito más de presión por parte de la Procuraduría».
Con información de SDPNoticias.com
