Ante la detención de dos presuntos capos Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, así como el crimen del político local Héctor Melesio Cuén Ojeda, realizan sus actividades cotidianas algunos con zozobra otros con tranquilidad de acuerdo a voces ciudadanas consultadas.
Julio César Caro | ADN Informativo
Culiacán, Sinaloa. – Ante los recientes hechos delictivos y de captura de dos presuntos delincuentes Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, algunos ciudadanos consideran que sienten tensión en la seguridad en la capital de Sinaloa, por lo que ven la necesidad de que las autoridades de los tres niveles de gobierno realicen más patrullajes señaló Verónica López de la colonia Benito Juárez.
“He visto más de tránsito, pero patrullas de la policía municipal no he visto, no me ha tocado ver, hay un temor la verdad por la cuestión que si me llegan asaltar o que me quiten el carro si me da un poco de temor”.
El comerciante Mariano Cota del sector Barrancos, dijo que en su andar no ha sentido inseguridad, salvo el mensaje de advertencia que pedían toque de queda, pero afirmó que su familia no siente temor que recrudezca la violencia en la localidad.
“Se siente tranquilo, no se ve movimiento ni nada, solo los rumores de las redes sociales del toque de queda, pero el ambiente en general está tranquilo, se puede andar en la calle, no se ve nada de inseguridad”.
La oficinista Yamileth Hernández del sector Cedros, dijo que se siente con temor por los patrullajes que han realizado en diversos puntos de la localidad elementos castrenses y policías estatales en unidades incluso artilladas como si se viviera una guerra, pero confía que logren brindar la seguridad necesaria.
“Se ha escuchado que hay mucha seguridad, y eso es para ponernos alerta, si nos ponen tensos, de igual manera así estamos todos los compañeros de trabajo hablando del ambiente como se siente”.
Efrén Zamudio del sector Díaz Ordaz señaló que hay una sensación de inseguridad permanentemente debido a la falta de oportunidades económicas y la desintegración familiar, y las nuevas generaciones romantizan la narco cultura entre otros factores que afectan a la comunidad en general.
“Yo creo que es crucial reconocer que la inseguridad no se va a combatir nada más con poner más policías en las calles, necesitamos un enfoque integral, necesitamos manejar una mejor educación, necesitamos tener la creación constante de fuentes de empleo bien pagadas, fortalecer las redes comunitarias, que los ciudadanos se sientan parte de la solución, no nada más víctimas del problema”.