Exige Loza Ochoa explicación de las autoridades en asesinato de Raymundo y ‘levantón’ de su padre
El joven fue acribillado a balazos a poco menos de dos horas de haber sido atendido por el vicefiscal Dámaso Castro, en la Fiscalía del Estado
CULIACÁN. Raymundo Reyes Ríos, tenía 24 años; falleció poco después de las 3 de la tarde del pasado miércoles, en el área de urgencias del Hospital General de Culiacán, tras ser atacado a balazos cuando circulaba en su vehículo sobre la calle Gardenia, en la colonia Lázaro Cárdenas.
En ese punto, un vehículo con sujetos armados se emparejó a su Ford Explorer color tinto, y abrieron fuego contra su persona en múltiples ocasiones, hiriéndolo de muerte.
Hacía poco menos de dos horas que se había apersonado en la Fiscalía del Estado, buscando por todos los medios, primeramente, proteger su vida, y exigir el avance de tres averiguaciones previas, las cuales presuntamente se habían estancado debido al capricho de servidores públicos del órgano autónomo.
De acuerdo a Oscar Loza Ochoa, una de estas carpetas era por amenazas, las cuales manifestó seguían repitiéndose; otra carpeta era por robo a su patrimonio, particularmente de materiales de construcción ya que se dedicaba a ser contratista, y una tercera carpeta correspondía a la privación de la libertad que Raymundo había sufrido el pasado 22 de diciembre de 2022. En esa ocasión, fue liberado cuatro días después, tras pagar un rescate por aproximadamente 1 millón de pesos.
El activista de los Derechos Humanos en Sinaloa, reveló que Raymundo ya había acudido a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, para que le ayudaran a que caminaran las carpetas de investigación; lugar donde al parecer recibió una respuesta vaga en torno a su caso.
“Él era de esas personas que tienen fe en que puede darse la justicia y alcanzarse, a pesar de que no encontró la mejor comprensión dentro de los ministerios públicos que atendieron su caso, ni tampoco los investigadores, el siguió insistiendo, tocando puertas”, dijo.
Por su mediación y la de Leonel Aguirre Meza, presidente de la Comisión de Defensa de Derechos Humanos en Sinaloa, lograron que el joven fuera atendido por el vicefiscal Dámaso Castro Zaavedra, quien se comprometió a poner cartas en el asunto; no obstante, en poco menos de dos horas Raymundo ya había sido asesinado.
Pero la tragedia no termina ahí. La noche del miércoles, familiares de Raymundo reportaron la privación de la libertad de su padre, el cual hasta el momento permanece en calidad de desaparecido.
“¿Qué pasó? Eso es una cosa que nos debe explicación el licenciado (Dámaso Castro). Qué pasó que después de la muerte del muchacho levantan a su papá, y hasta ahorita, como nos dice la familia no saben de él, y entre las cosas que dicen, que es una verdadera tragedia, que no van a entrar a velar al hermano mientras no sepan que pasó o qué esté pasando con su padre, esa es la tragedia familiar”, dijo.
KEVIN CHICUATE
