Incorporan estrategia HEARTS a Sinaloa para prevenir infartos
CULIACÁN.- Con el propósito de mejorar la prevención y control de la hipertensión arterial en el primer nivel de atención, la Secretaría de Salud de Sinaloa, incorporó a su catálogo la iniciativa HEARTS y la estrategia IAM (Infarto Agudo al Miocardio).
Cristian Morales representante de la Organización Panamericana de la Salud (Ops) en México, detalló que es la iniciativa más importante a nivel global para la prevención y el control de las enfermedades cardiovasculares y propone el fortalecimiento de un modelo de atención integral, donde participan no sólo el personal médico, de enfermería, sino también los promotores de la salud, nutricionistas, personal de farmacia, entre otros.
“Desde antes de la pandemia del COVID– 19 el problema principal que afecta la morbo mortalidad de los mexicanos y las mexicanas son las enfermedades crónico degenerativas, por supuesto como factor de riesgo subyacente la obesidad y sobrepeso y una de sus manifestaciones en términos de mortalidad la hipertensión, la diabetes los canceres, etc., entonces cuando llega la COVID 19 se encuentra con un terreno fértil una enfermedad que asociamos con las vías respiratorias pero que es una enfermedad inflamatoria que afecta todos los órganos del sistema humano, y los estragos que ha hecho en términos de mortalidad”.
Por su parte el secretario de Salud Efrén Encinas Torres, Indicó que se cuenta con las condiciones para llevarla a cabo en cuanto a recursos humanos, capacitación de especialistas y tecnología para que los pacientes puedan recibir atención para prevenir y tratar de manera oportuna un infarto.
En México las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte, en el 2018 de acuerdo al INEGI se detectaron más de 141 mil casos, 30 por ciento de estos pacientes aún no cumplen los 70 años.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición del 2018 se estima que este padecimiento crónico afecta al 18.4 por ciento de la población mayor de 20 años en el país. Por lo que lograr un buen control resulta esencial para reducir la discapacidad y muerte por eventos como los infartos o los accidentes cerebrovasculares.