El tiempo que nos queda
La administración del tiempo no solo es tener una agenda ordenada donde anotas tus pendientes, es mucho más que eso, va desde asignar prioridades y ejecutar bien para hacer más y mejor, incluyendo el equilibrio entre lo que quieres y lo que puedes hacer.
Algunos datos interesantes del tiempo para que puedas administrarlo mejor son:
· Es un recurso: el cual no es renovable, se vive ese momento y no se puede utilizar de nuevo.
· Cuesta: cuando tienes una entrega de mercancía por hacer y no cuentas con el inventario suficiente y no puedes realizar la entrega en el tiempo establecido te puede costar el cliente. También cuando tus colaboradores no tienen un Plan de Trabajo bien establecido y solo están perdiendo el tiempo para que llegue su hora de salida, te impacta como gasto porque no es tiempo productivo.
· Cambia las preferencias de compra del cliente: al comprar algo uno de los factores es la fecha de entrega, puede ser el mismo precio, la misma marca, pero uno te lo entregan mañana y el otro en quince días, el cliente quiere inmediatez.
· Es una inversión: tener una plática de una hora a la semana con cada uno de tus colaboradores para dar seguimiento a pendientes profesionales y estar enterado de acontecimientos personales importantes puede generar un beneficio para tu gestión de equipos, mucha gente dice no tengo tiempo, la operación me consume, puedes evitar tiempo dinero y esfuerzo posterior al atender lo importante.
· No perdona: si no logras el equilibrio entre lo personal y lo laboral a la larga repercute en tu actitud, motivación y productividad.
· Es tu aliado: cuando lo planeas y te vas adaptando a los cambios te da mejores resultados que cuando no sabes ni en qué “se te fue el tiempo”.
· Paga deudas: cuando agotas tu cuerpo física o mentalmente te cobra y tienes que recuperarte con tiempo de descanso, y si no lo haces tus actividades se ven afectadas porque tu rendimiento no es el mismo, si eres emprendedor cuida tu salud, recuerda que eres tu principal elemento.
· Tiene memoria: si creas rutinas laborales y todos los días al inicio de la jornada revisas pendientes tu equipo estará listo al hacerlo un buen hábito.
· Te rinde cuando eres objetivo: si quieres hacer muchas cosas a la vez el estar pensando en todos esos pendientes te consumirá aún más tiempo, mejor enfócate en lo que has decidido hacer, debes estar en cuerpo y mente en lo que en ese momento requieres.