Uno de los oficios más añejos está en crisis debido a la pandemia, los lustradores de zapatos manifestaron que para no comer les alcanza por la poca afluencia de personas en el centro de la ciudad.
Los boleros comentaron que anteriormente a la crisis sanitaria atendían hasta 15 clientes diarios, pero las cosas han cambiado, y para ellos un día bueno es atender a 5 clientes.
«De la patada, no hay chamba, necesitamos que el gobierno nos apoye con algo».
«Nos ha ido mal y vamos por ese camino, todo va subiendo, hay poco trabajo y estamos preocupados más por la salud que por el tema económico».
«Está solo, no sacamos ni para comer, tres o cuatro boleadas y es todo, y ahora que van a cerrar los panteones pues más solo».
Los lustradores externaron que sería de gran ayuda para ellos que el gobierno municipal les apoyara con una despensa, ya que para ellos es redituable que la sociedad vuelva a la normalidad, pero hasta el momento no hay claridad en ese aspecto.
Con información de Juan Almodóvar
