Las experiencias que han tenido otros años vecinos de la colonia Francisco Villa, donde ya lo han perdido todo debido al pésimo servicio de alcantarillado, pero sobre todo del taponeo de basura que se estanca en alcantarillas por la falta de conciencia de habitantes de los alrededores, quienes no piensan que ponen en riesgo la vida de otros al tirar desperdicios, ponen a temblar a más de uno.
La señora Inés, quien habita desde el año 1963 en esta colonia de la ciudad, denuncia con tristeza que cuando ella llegó a esta colonia la lluvia se veía de otra manera, pues hasta la podía contemplar sin preocupación, pero con el paso de los años y la construcción de un centro comercial todo cambió. Cada vez que llueve le prenden veladora a sus santos para que el agua no se les meta.
“Triste, luego mortificada por todo el cochinero que se hace, me lo echan para acá, pues para sacarla con mucho trabajo de suerte somos muchos, pero mire la tristeza es que toda la gente echa la basura para allá, aquí viene a dar toda la basura, ya que vi mucha agua si me dio miedo porque yo ya no puedo caminar bien, no tengo fuerza en las piernas se arriesga mucho a muchas cosas salir a ver el atasque que hay”, comentó.
Por fortuna la lluvia de ayer no provocó inundación en este sector, sin embargo los vecinos llenos de temor llenaron de lonas que colocan en sus bardas para que el agua no se les meta. En esta ocasión trabajadores del ayuntamiento de Culiacán acudieron desde temprano a recoger los cerros de basura que se quedaron estancados en las alcantarillas, sin embargo vecinos denunciaron que otras ocasiones tardan hasta dos días para ir y levantar toda la basura que se queda estancada en ese sector.
Susana Bastidas
