Manejo de las emociones, necesario para las relaciones familiares

Las relaciones familiares, más allá de la contingencia sanitaria y las situaciones que ha dejado el confinamiento en casa, se tienen que basar en el respeto, la comunicación, la cooperación, la libertad y la igualdad. Por ello es necesario tener herramientas prácticas para saber cómo prevenir y actuar para que desde el círculo familiar no haya maltrato ni violencia por el mal manejo de las emociones propias, pues éstas pueden ser una barrera para la convivencia con los demás.

Rosa María Gámez Mendívil, del Departamento de Capacitación del Consejo Estatal Para la Prevención y Atención de la Violencia Familiar (Cepavif), señaló que el cuerpo humano comienza a dar señales cuando alguien tiene un grado de molestia y ésta puede llegar a un grado de violencia, como la respiración agitada o calor en las manos. Ante ello, es mejor parar y no rebasar esa línea tan delgada, pues al final ejercer o no dicha violencia termina siendo una decisión propia aún y con las sensaciones corporales avisando que paremos.

“Es bien importante cuando hablamos de respeto, que para mí es el principio rector que guía todas las relaciones humanas y familiares, porque si no respeto al otro es bien difícil que haya una convivencia pacífica. Sin embargo, antes de ir hacia el otro, es muy importante revisar la parte personal, revisar qué es lo que pasa conmigo, cuáles son esas emociones que estoy pasando, cuáles son esos pensamientos, esas sensaciones”, dijo.

Gámez Mendívil recalcó que se trata de saber, en esta situación de pandemia, de estar alerta de las emociones, pues si no será muy difícil que la comunicación se dé de una manera efectiva. Señaló que situaciones como las tareas domésticas tienen que estar repartidas entre todos los miembros de la familia, de acuerdo a la edad, a la condición y a la posibilidad de cada integrante. Incluso, el cuidado de los niños y de los adultos mayores, lo cual puede romper el equilibrio y provocar situaciones como la violencia.