CULIACÁN.– Por problemas de obesidad que presentan algunos policías municipales, el Ayuntamiento de Culiacán busca alternativas para conservar el mayor número de elementos.
El alcalde Jesús Estrada Ferreiro señaló que ante la exigencia que les han hecho de no tener uniformados pasados de peso, han procedido a darlos de baja, al igual que quienes no pasan el examen de Control y Confianza. Asimismo, indicó que este problema no se origina en la Alcaldía, sino de Instituto Estatal de Ciencias Penales y Seguridad Pública.
“La pregunta mía es por qué si los contrataron obesos hoy nos exigen que no tengamos gente obesa, o sea son fallas de origen. Son personas con familia, son trabajadores que requieren trabajo, pero claro, el ser obeso en exceso es un riesgo para ellos mismos, porque no pueden correr, no pueden defenderse, no pueden en un enfrentamiento hacer algo protegerse menos proteger a la demás gente. Los que se puedan rescatar, se van a rescatar. Yo soy de la idea de que no podemos echarlos como cosas que no sirven”.
El munícipe comentó que cuando se desempeñó como subprocurador de Justicia, en 1981, le tocó pasar por la misma situación, donde le pidieron que despidiera a todos los elementos con alto grado de obesidad. A esto decidió, enviar a quienes tenían este problema de salud a áreas con menor demanda física.
Añadió que independientemente al número que tenga de policías el municipio, los cien elementos que llegarán de la Guardia Nacional podrán cubrir la necesidad de uniformados que tiene Culiacán.