CULIACÁN.- Con un peso estimado en 20 toneladas, y una composición anómala de fierro, níquel, cobalto, iridio y otros elementos, el meteorito Bacubirito es considerado único en la tierra. Incluso, en 2018 ha sido nombrado como un patrimonio de Sinaloa.
Emilio Terán Bobadilla, investigador y académico de la Facultad de Ciencias Físico-Matemáticas de la Universidad Autónoma de Sinaloa, comentó que por las características y la aportación científica que tiene esta pieza espacial, buscan que también sea reconocida como patrimonio cultural histórico de México y posteriormente de la humanidad.
“Es el meteorito más largo del mundo, con más de 4 metros de un extremo al otro. Bacubirito, es una pieza invaluable a nivel mundial, porque es uno de los cinco más grandes a nivel mundial. Bacubirito es único, por eso mencionaba que es un meteorito anómalo, no hay en el mundo otro meteorito como el Bacubirito”.
Este meteorito fue descubierto hace más de 150 años, cerca de la comunidad de Bacubirito, en el municipio de Sinaloa. Este ha sido expuesto en el Parque Constitución y en el Centro de Ciencias de Sinaloa. Por la falta de cuidados, a decir del investigador este cuerpo celeste se ha deteriorado, pues por los efectos del clima, la humedad y el agua, muestra partes oxidadas. Además, de que años atrás fue banalizado.
Añadió que, por años, pese a que los meteoritos son tomados como una biopsia al universo, el Bacubirito, permaneció abandonado, pues ni la comunidad científica lo tomaba como referencia. Fue hasta 2011, cuando se retomó como tema, se le hicieron pruebas y se planteó crear un espacio donde pueda ser expuesto con los cuidados necesarios para su conservación.
“Cuando fue descubierto era el más masivo del mundo. Fue una noticia mundial; motivó a que algunos investigadores extranjeros vinieran a conocerlo. A principios del siglo era un atractivo turístico estatal; había folletos que invitaban a ver el Bacubirito, y la gente venía especialmente a ver el meteorito”.
Como parte de la rehabilitación del Centro de Ciencias de Sinaloa, se ha contemplado un nicho especial para esta pieza, un lugar en el que los visitantes podrán admirarlo y conocer más sobre él y la importancia que tiene para la ciencia.
